Manipulación y propaganda: El régimen castrista lucha por el control de Elián
Tras el rescate de Elián, el régimen cubano lanza una campaña internacional para exigir el retorno del niño a la isla. Con un descaro típico de las dictaduras, la familia de Elián en Cuba, bajo presión del gobierno, se convierte en portavoz del régimen. Juan Miguel González, el padre de Elián, quien antes no se opuso a la partida del niño, ahora clama por su regreso. Sin embargo, en el trasfondo, muchos se preguntan si este “pedido” no es más que otro ejemplo del control absoluto que el gobierno ejerce sobre los ciudadanos.
La dictadura castrista utiliza todos los medios a su alcance para manipular la opinión pública. En Cuba, las escuelas y los centros de trabajo son obligados a participar en marchas y mítines en apoyo al “regreso de Elián”. La propaganda es constante: imágenes del niño aparecen en periódicos, televisión y murales, presentándolo como un “héroe” atrapado en las garras del enemigo.
En Estados Unidos, la batalla legal por la custodia de Elián se intensifica. Su familia en Miami, compuesta por exiliados cubanos que conocen de primera mano las atrocidades del régimen, lucha por mantener al niño en libertad. Sin embargo, las tensiones entre el gobierno de Estados Unidos y la dictadura cubana complican la situación.
Los exiliados cubanos entienden que devolver a Elián es condenarlo a una vida de adoctrinamiento y represión. Mientras tanto, la administración estadounidense, encabezada por Donald Trump, enfrenta presiones políticas internas y externas. La vida de un niño inocente se ha convertido en el epicentro de un enfrentamiento ideológico.
